por Grupo de trabajo Desmemoriados | May 30, 2012
Tal vez no sea cierto que el abuelo se sentaba todas las tardes de verano a la puerta de la cuadra en la que pacían cuatro o cinco vacas. Encendía un cigarrillo mientras miraba distraído más allá de la vieja tapia que tenía enfrente. En algún momento, cualquiera de...