Conmemora una victoria del bando sublevado contra el gobierno de la II República Española en los primeros meses de la guerra civil (septiembre 1936). La guarnición instalada en el Alcázar secundó el alzamiento el mismo 18 de julio de 1936 y el gobierno, viendo fácil la conquista, empeñó múltiples medios para lograrla. Sin embargo, la actuación conjunta de la columna que venía de Andalucía con tropas procedentes de Ávila, unido a la resistencia de los atrincherados, terminó con la victoria del bando sublevado. Victoria que si bien carecía de gran importancia estratégica, sí la tenía en el plano moral y propagandístico.